La mujer que quería pero no sabía que quería.
La modelo desconocida: quería pero no quería, deseaba pero no quería, quería pero no deseaba, sabía que quería pero no sabía que sabía, deseaba pero no quería, y quería pero no deseaba. “¿Era mariposa o era humana? Era humana pero también mariposa, y eso es ser humano. Esa es la condición humana. Conflicto. Y el sexo en el medio, o en el centro. “El problema no es entre la fantasía y la realidad (la mariposa es tan real como Chuang-Tsé), sino entre un saber sobre los cuerpos que supone la escisión y el deseo. Chuang-Tsé sabe que existen mariposas y hombres y desea liberarse de la cárcel de un cuerpo mortal, de sus bajas pasiones. ¿No se libraría de hecho si lograse saber que solo es una mariposa que sueña ser un hombre? Sería necesario que, a partir de esta certeza organizase toda la cadena preceptos en función de una nueva cadena de percepción ascensional, agregando a un saber sobre los sueños de las mariposas que -entre nosotros- se califica comodelirio.”
Pág. 112. GERMÁN LEOPOLDO GARCÍA en “Macedonio Fernández: la escritura en objeto”. Siglo XXI Argentina Editores. Buenos Aires, 1975).