(La imagen de tapa fue compuesta por AMILCAR MORETTI en la medianoche del 17 de mayo del 2021. En La Plata ciudad, BUENOS AIRES).
Me implico total en las fotografías. Y hoy, más que antes que el 2015, brotan muchas con su pusilánime miedo inyectado por los medios de comunicación, campaña de la que no son ajenos los feminismos, usados, instrumentados, al menos muchas de sus tendencias. El Poder, el Capital ha cooptado e instrumenta los reclamos, y lo progresista se hace reaccionario. De forma tal que el neoliberalismo del que hago lo que quiero y me cago u olvido del otro, indiferente, impiadoso, implacable, se convierte en “progresista” aunque a esta altura todo el común parece querer desembocar en un capitalismo neofeudal tecno-financiero. La Gran Distopía. El progresismo sexual de la pequeña burguesía urbana, vacío de igualdad, teatralización de la Revolución, retórica engañada de nomenklatura estalinista de vanguardias académicas que se alimentan del Norte. Fraseo, chamuyo de cambio, tonto, con puntos reales.
La violencia es innata en el hombre. El Capital, con su lógica propia, la estimula en su maníaco circuito de acumulación permanente, generando insatisfacción contínua, malestar perpetuo, el final que nunca se alcanza. Los movimientos LGBT+….componen desde hace tiempo una diversidad a la derecha. Gana elecciones con el fascismo en Europa, recientemente en Madrid. La Diversidad vota fascismo, neo. Más allá de algunos avances, hoy, que pueden ser retrocesos mañana, mucho de la Diversidad habla de vacíos y confusiones, destituciones rumbo a la masacre. Eso sí, con nuevas tecnologías para quien pueda pagarlas. La heteronorma, su goce y placer, está muy cerca se revelarse, de nuevo, como siempre, como la Subversión, no la disidencia.
AMILCAR MORETTI