VIRGINIA CERCA DE LA VENTANA, DESNUDA, ATENTA A NADA O SU PROPIO CUERPO
La ventana, como un componente central para el ingreso de luz en la imagen de interiores, con su iluminación natural, combina en sí 
misma dos factores que ya estudiaron detenidamente los grandes maestros de la pintura occidental (el Oeste) europeo, desde el siglo XV, al menos. Servía la ventana como elemento de fuga, perspectiva y profundidad y a la vez para el ingreso de luz -o su excusa, en una imagen de iluminación imaginada-, a la vez que permitía dar cuenta del exterior, del paisaje que hay fuera de ese interior central, que marca la ambientación. Cuando el centro es el cuerpo de una mujer desnuda, esa ventana, luz y juego de exterior-interior permiten muchas sugerencias, que van desde lo que puede “escaparse” hacia afuera hasta el que puede mirar hacia el interior en la intimidad. La sugerencia siempre está abierta. En mi trabajo de Fotografíaa de Autor en Desnudez Femenina suelo obviar el registro de la ventana en sí, o apenas dejarla ver de modo fragmentado, y centrarme en la luz que deja pasar, en contraste, suave o confrontativo, con la oscuridad que resalta en el interior de la casa. Claro que a veces emparento ambas iluminaciones, la de ventana y la del interior y trato una continuidad, aunque, como se observará, no es este el caso. El interior aquí predomina oscuro. En fin, lo que busco no es una cuestión de simple técnica o dominio de procedimientos, que no me interesan en verdad, sino poner de relieve las características naturales del cuerpo de la mujer desnuda, en el que se advierte una sensualidad carnosa que no proviene de afeites o procedimientos invasivos sino de las propias volutas y curvas de una carnalidad cotidiana. (AMILCAR MORETTI)
Modelo: María Virginia Grieco.
(Esta segunda serie de imágenes sobre el tema de la Ventana o aberturas de una casa, la Iluminación natural de interiores y la Mujer Desnuda fue editada, como la primera y anterior, el jueves 24 y viernes 25 últimos, es decir, ayer y anteayer. No habían sido nunca publicadas ni siquiera revisionadas por ERÓTICA DE LA CULTURA y permanecen junto a otras 1.500 de la modelo, tomadas en una sesión fotográfica en mi hogar, hace un tiempo atrás. De los originales, siempre editados, en su oportunidad fueron dados a conocer muy pocos, quizás dos docenas. Ahora, he procedido al rescate de algunas de esas numerosas imágenes no vistas, como también lo haré con gran parte del casi centenar de modelos, actrices y bailarinas que posó, con contrato escrito, honorarios y viáticos en los últimos cuatro años, aproximadamente. Hay mucho material que estimo expresivo y merece ser exhibido.)
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