«Es inviable una distinción entre la prensa institucional y otros oradores», se señala que ha advertido la Corte Suprema de Estados Unidos.
Pienso en el colega Pepe Eliaschev -ambos en el diario EL DIA de la Argentina, en la ciudad de La Plata-, al reproducir esta (la) información que, demorado, descubrí recién ayer, a casi tres semanas de su difusión por la Agencia Reuters América Latina. Recuerdo que tiempo atrás, no hace tanto (¿un año? ¿Dos?), leí un texto de Eliaschev en el que se mostraba preocupado, inquieto, quizás indignado porque los blogueros que hacían periodismo, los blogueros que escriben periodismo, comenzaran a ser considerados a igual nivel que los periodistas profesionales, tradicionales, de oficio, graduados o no pero dedicados toda su vida a trabajar en esta profesión que, en verdad, en muchos casos se continúa o no puede evitarse (al menos en escritura) por una extraña pasión, una peculiar compulsión. Tal vez, la misma compulsión del escritor que no puede dejar de tomar notas o desarrollar sus textos en cualquier lugar y momento de su vida. Yo entiendo la escritura de periodismo como una forma de la literatura. Me llamó mucho la atención aquella vez el criterio alarmado de Eliaschev, no ya por su «dilatada experiencia de preguntador» o de «preguntador insaciable», como él acepta definirse aún en 1996 (1), sino porque -por sobre nuestra contrapuesta mirada política acerca de la Argentina de los últimos años- es un tipo que conoce de literatura, es decir, de escritura y lectura, cualquiera sea el soporte de producción escrita, divulgación o edición. Tanto es así que Eliaschev puede hablar mano a mano con Ricardo Piglia sobre Flaubert y Sarmiento como escritores, lo que no puede cualquiera, periodista o no. (2)
(1) y (2) «ESTO QUE QUEDA. Voces e ideas de fin de siglo», octubre 1996, Editorial Sudamericana, págs. 9 y 109-121 (Introducción y reportaje a Ricardo Piglia («Pistas falsas, pistas verdaderas»), respectivamente.
Blogueros tienen mismas protecciones que la prensa
tradicional: tribunal EEUU
Viernes 17 de enero de 2014
Por Dan Levine
http://lta.reuters.com/article/idLTASIEA0G05O20140117?pageNumber=2&virtualBrandChannel=0&sp=true
SAN FRANCISCO (Reuters) – Un bloguero tiene derecho a las mismas protecciones de la libertad de expresión que un periodista tradicional y no puede ser responsable de difamación, a menos que actúe de forma negligente, resolvió el viernes un tribunal de apelaciones de Estados Unidos.
Crystal Cox perdió un juicio por difamación en el 2011 sobre un blog en el que acusó a un síndico de quiebras y al Obsidian Finance Group de fraude impositivo.
Un tribunal de primera instancia decidió que Obsidian no tenía que probar que Cox actuó con negligencia por el hecho de que la bloguera no demostró ser periodista.
Pero en el fallo del viernes, el Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito de San Francisco dijo que Cox se merecía un nuevo juicio aunque no fuera una reportera tradicional.
«Como advirtió con precisión la Corte Suprema, es inviable una distinción de la Primera Enmienda entre la prensa institucional y otros oradores», escribió el juez del Noveno Circuito, Andrew Hurwitz, en una decisión unánime de un panel de tres magistrados.
Steven Wilker, abogado de Obsidian y del síndico, señaló que el Noveno Circuito sostuvo la conclusión de que no había dudas de que la publicación de Cox era falsa.
«Las declaraciones falsas y difamatorias de la señorita Cox causaron daños sustanciales a nuestros clientes y estamos evaluando nuestras opciones respecto del fallo del tribunal», escribió Wilker en un correo electrónico.
Eugene Volokh, profesor de Leyes en la Facultad de la UCLA y representante legal de Cox, dijo que Obsidian ahora tendría que demostrar que Cox tenía conocimiento de que su afirmación era falsa al momento de publicarla.
El fallo del viernes es particularmente importante en la era de los contenidos online, destacó Volokh.
«En estos días y esta época, con tantas cosas producidas por personas que no son profesionales, es más difícil que nunca decidir quién es miembro de la prensa institucional», sostuvo Volokh.
(Reporte de Dan Levine. Traducido por Damián Pérez)
Vale leer la versión de Reuters consignada en: