«(…) Nuestras nadas
poco difieren; es trivial y fortuita la
circunstancia de que seas tú el lector
de estos ejercicios, y yo su redactor».
J.L.B.
(1)

«(…) así veía
La eterna esfinge a su inconstante hermano,
El hombre, y con la tarde un hombre vino
Qué descifró aterrado en el espejo
De la monstruosa imagen, el reflejo
De su declinación y su destino.
Somos Edipo y de un eterno modo
La larga y triste bestia somos, todo
lo que seremos y lo que hemos sido.
Nos aniquilaría ver la ingente
Forma de nuestro ser; piadosamente
Dios nos depara sucesión y olvido.»
(del poema «Edipo y el enigma», de JORGE LUIS BORGES, página 268, Obra Poética (1923-1967), Emecé Editores, 1967, Buenos Aires).
(1) «A quien leyere», en «Fervor de Buenos Aires» (1923), de JORGE LUIS BORGES. En «Obra Poética» (1923-1967). Idem. ant. cit. Buenos Aires, 1967.