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VARGAS (LLOSA) Y EL TEMA DE LAS TORTAS CON EUGENIA. De Las Narratividades de Miji. Ficción en texto e imágenes por AMILCAR MORETTI

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LAS TORTAS DE EUGENIA y VARGAS (LLOSA). PABLO CHERNOV. “ANATOMÍA HUMANA”. De Las Narratividades de Miji.

 

 

Foto por AMILCAR MORETTI. Lunes 20 de febrero del 2017. Argentina.
Foto por AMILCAR MORETTI. Lunes 20 de febrero del 2017. Argentina.

 

 

 

 

     “Entonces fue cuando Vargas se aterrorizó. En fin, obedeció. Porque está el tema del poder, no te olvides. De quién manda. Es que a Vargas (por Llosa, ¿eh, se entiende?) le dio miedo. Tenía deseo y temor. Y estaba vigilada, para no salirse del marco, aunque ya se había salido, y todos los demás no sabían. Hacían como que no sabían. Pero, como siempre, todos sabían”, me concluye MIJI, con sus cuentos. Sus historias, ficcionalidades. Narratividades de MIJI, digo yo.

 

 

              Resulta que Eugenia era mayor, o más grande, y Vargas una piba. Vargas se considera fea, “y no”, me dice Miji. Yo lo sé: ella misma se exageraba: primero que nada se cortaba -se corta- el pelo como varoncito. Y ahí, sin prejuicios -porque hay rapadas muy sexies- se delata sola. O tira el mensaje, como aviso. Los ojos algo saltones, grandes, llenos de curiosidad y temores. Suelen marchar juntos, curiosidad y temor. La boca, los labios, no, al contrario, de pimpollo, choricito, churrasco, si nos hacemos los perrone. Y de Vargas vamos a Eugenia mayorcita, astuta, haciendo pis alrededor para fijar los límites, de ahí me sacaron del corral. La Red. Me tiró la Red. Me sacaron la Red. Si se quiere, me quitaron la Red de encima. Y Vargas en silencio, calladita.

 

 

               “Te decía de los labios”, me dice Miji. “Sí, ya sé, churrasco”. “Que no a todos les gusta”. “¿Qué cosa?”. “El churrasco”. Bueno, pero ahí estaba, con su presencia de varoncito.  Se bajoneaba sola, “forma de pera”, se decía así misma. Temor, miedo, casi terror (pero la fantasía, el deseo parece que estaba, curiosidad que te dije). “¿De qué hablás?”. ¿De qué voy a hablar? De pene, de pija. Ya no es solo envidia del pene. Ahora es miedo al Pene, y entonces todos lo quieren. Eugenia entre ellas. Tiene el Pene, con Vargas, claro.

 

         “Resulta, ya te conté, que Vargas (por Llosa ¿viste?) mostró los pies. Se le ocurre mostrar los pies. Y ahí fue tu perdición, ¿o la perdición de ella, Vargas?”. “Sí, claro, ya sé, me sacaron de la Red”. “Y te agrego más -le agrego-: no eran pies demasiado lindos. Eran juveniles, pies de estreno, adolescentes, de nena que pretende. Aunque las uñas alargadas le daban ese toque femenino que autoriza, como mayor de edad”. Mirá, yo le dije, son las pantorrillas. Están fuertes, no sé los muslos, que es lo que me atrae, siempre. Tanto no se animaba. Solo las pantorrillas. Se fotografiaba hasta las pantorrillas, pies con pantorrillas. Fuertes, esos bíceps de pierna. El resto debe ser de Eugenia, la donna, la madre. Lo que te dije, la Pija, simbólica pero influyente. ¿En ella, o en el “él”? No sé, es como que todo se confunde.

 

 

        “Pero la tiene clara”. Sí, le digo. Eugenia la tiene clara. Vargas quizás tenga curiosidad por otra cosa, otros asuntos. Probar. Además, viste que la elección de objeto (sexual) en la mujer no define de por sí la identidad de mujer lesbiana. En la mujer parece más amplio. Puede ser un objeto elegido de un lado o del otro, pero la identidad es otra cosa. Viene de otro lado. “No me la complejices”, me dice Miji. No, le digo, es que resulta que el tema de que tengas una acción o encuentro homo ocasional no marca la tendencia hegemónica, es solo un dato, un indicio. “¿El Azar, decís?”. “Sí, algo de eso. Azar. No es eso pero es como si fuera eso”. Bueno, Eugenia parece más definida. El Pene lo quiere ella. Lo tiene ella -con Vargas- y compite. Fija límites. “Como te dije, es astuta. Tiene experiencia. Se da cuenta, olfatea. Y si ve otro pene ahí se pone en guardia”. “¿Pene de varón, decís?” “Sí, eso. Como yo digo: de varón masculino”. “Ah, sí, vos decís así”.

 

 

      “Mirá, me dice Miji, te explico: Me tienen las bolas llenas. Las minas tienen mucho poder. Demasiado poder. Por eso vienen los tipos, ya locos, y las queman. Sí, las queman vivas”. “Uh, si te escuchan las feministas”. “Me chupan un huevo, ya te dije”, me dice Miji. “Me tienen las bolas llenas”. Y yo me quedo pensando: es como demasiado concha. Demasiada concha. Sí, demasiada concha, todo femenino, concha. Y todo a partir de la Pija. No la envidia, tanto, sino el temor a la Pija. Y todos, todas la quieren.

 

 

    “¿Y entonces?”, le pregunto. “No, no sé. Me parece que no va a terminar bien. Algo no encaja, no anda. Está todo bien, pero no funca. ¿Agarrás lo que te digo? No sé cómo definirlo. Pero es demasiado poder que anda dando vuelta sin manija”. “Sí”, le digo a Miji. “Para mí lo manijea la derecha, que trabaja por ambos costados, el retardatario y el super apurado, el monolítico de puro y únicamente hétero, y el diversificado de que todo vale. Pero es mentira. Ficción. Somos amplios, diversos, multiplicidad, pero no, porque el poder es de la derecha”.
      

 

                Espero un rato, y le añado: “Por eso lo del 51%”. Es la confusión total. Muy complejo. Apoyan lo que les perjudica. Y lo que les beneficia creen que les cayó del cielo, como lluvia de monedas de oro. “Confusión total”. “Como que cuanto peor, mejor, para hacerla trotkista, maoísta”. “Pero Amílcar, decíme: ¿vos que le dijiste?”. “Yo, bueno, yo lo de siempre: la invité a Vargas a hacer de modelo en desnudo de fotografía, la que yo hago”. “¿Y?” “No, arrugó. No todas pueden ni deben. No es obligatorio. Además, ella, como te dije, se dice fea, pero debe ser fea para la mirada masculina, creo, cree ella. Por eso pastorea con Eugenia. A Eugenia le gusta. Pero Vargas se confunde más. Dice “con chicas, como debe ser”. ¿Cómo debe ser? Ah, hay un “deber ser” entonces. A mí me parece que duda, está aprendiendo, tiene miedo, y desearía probar”. “Pero Eugenia no la deja”, me dice Miji. “No, claro que no. A ver si se le escapa”.

 

 

                 “¿Y qué hiciste?”. “Me dí cuenta, de movida: y le dije a Eugenia si quería hacer ella de modelo desnuda en la fotografía que yo hago”. “¿Nooo, ¡sí!?” “¡Me hacés cagar de risa! ¿Y qué dijo?” “Dijo que sí, claro, pero yo sabía que no. Además, no me llamaba mucho. Lo hice para probar. Probarla. Es lo único que Eugenia no va a hacer. Gustarle a un tipo. No sabe qué hacer con eso. No le interesa. La pija es ella. La mía compite, le rivaliza, y contra eso no puede. Pero igual gana porque mea el territorio propio. Vargas paga. No sabe, duda, y paga”.

 

                 Una cosa, “¿Conocés a Chernov?” “¿A quién?” “A Chernov, Carlos Chernov, el novelista argentino. Ganó un premio Planeta. ¿Conocés? ¿Leíste algo?”. “No, no lo ubico”. “Bueno no importa. En “Anatomía humana” habla de un mundo donde ya no hay tipos, machos, y todo lo manejan las minas. Y al protagonista lo tienen prisionero, para sacarle el esperma y fecundarse. Uno de los pocos tipos, machos que quedan. Las minas no cogen, le hacen la paja para inseminarse entre ellas. El poder lo tienen ellas. Es apocalíptica la novela. No hay tipos, casi. Y además de las que lo tienen prisionero y le sacan el esperma, están las brigadistas, que hacen ataques para asesinar a los últimos pocos tipos machos que quedan. Así que estas que lo tienen encerrado al protagonista, lo cuidan más, mucho más, pero es como que no existe. Un infierno. La confusión total”.

 

 

 

 

DE LA PÁGINA 138 DE “ANATOMÍA HUMANA”,

NOVELA DE CARLOS CHERNOV

 

 

                “Y por último, lo más grave: ante cualquier transgresión de las normas por parte de una sola de ellas, regían penas consistentes en terribles castigos corporales, que podían llegar a la mutilación o la muerte, para la seis mujeres. O sea que, además de custodiarlo a él, sus guardias se vigilaban entre sí en todo momento, alimentando el clima paranoico con permanentes sospechas.”

 

(Grupo Editorial Planeta. Grandes Escritores Argentinos y Latinoamericanos. Barcelona, España, 1996)

 

 

Foto por AMILCAR MORETTI. Lunes 20 de febrero 2017. Argentina.
Foto por AMILCAR MORETTI. Lunes 20 de febrero 2017. Argentina.

 

 

 

 

 

Foto por AMILCAR MORETTI. Lunes 20 de febrero 2017. Argentina.
Foto por AMILCAR MORETTI. Lunes 20 de febrero 2017. Argentina.

 

 

 

 

 

Foto por AMILCAR MORETTI. Lunes 20 de febrero 2017. Argentina.
Foto por AMILCAR MORETTI. Lunes 20 de febrero 2017. Argentina.

 

 

 

 

BALTHUS. LA LECCIÓN DE GUITARRA, 1934
BALTHUS. LA LECCIÓN DE GUITARRA, 1934

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