LO QUE HIZO AKIRA KUROSAWA CON MARTIN SCORSESE EN EL ROL DE VAN GOGH. En su película “DREAMS”, de 1990 (“Los sueños”). En “Crows” (“Cuervos)”, uno de los ocho episodios de la película póstuma de Kurosawa (1910-1998)
WHAT AKIRA KUROSAWA DID WITH MARTIN SCORSESE IN THE ROLE OF VAN GOGH. In his movie “DREAMS”, 1990. In “Crows” (“Crows”), one of eight episodes of the posthumous film by Kurosawa (1910-1998)
LO QUE HIZO EL GRAN VINCENT MINNELLI CON GENE KELLY DENTRO DE UNA PINTURA DE TOULOUSE LAUTREC EN EL PROSTÍBULO Y CABARET MOULIN ROUGE. Minnelli en su filme “Un americano en París” (1951)
WHAT MADE THE GREAT VINCENT MINNELLI WITH GENE KELLY INSIDE A PAINTING OF TOULOUSE LAUTREC IN THE PROSTIBLE AND CABARET MOULIN ROUGE. Minnelli in his film “An American in Paris” (1951)
Si uno mira atentamente se da cuenta que Fellini conocía bien los musicales de Vincent Minnelli y de Hollywood, y hasta qué punto le sirvieron de inspiración, y no solo para el reconcentrado casi final de “Ginger y Fred” (amilcar)
FOOTIT ET CHOCOLAT
“Durante los primeros años del cabaret, las carcajadas formaban parte de las veladas del Moulin Rouge. El arte del circo, entre otros, permitía que el público disfrutara de noches de conciertos y bailes. Entre los artistas que figuraban en los carteles del Moulin Rouge, se encontraban Footit y Chocolat. Este dúo cómico estaba compuesto por George Footit (1864-1921) y Rafael Padilla (1868-1917). El primero interpretaba a un payaso blanco autoritario, mientras que el segundo era un payaso negro que hacía de víctima.
https://www.pariscityvision.com/es/paris-de-noche/moulin-rouge/grandes-periodos-moulin-rouge
CHOCOLAT Y GENE KELLY: MINNELLI EN “UN AMERICANO EN PARÍS”
“Todo nos conduce de manera inevitable hacia un final apoteósico. Uno de los homenajes definitivos que el cine le ha hecho a la pintura, la danza y la música en general: «con la apoyatura sonora de Gershwin, los lienzos de Van Gogh suceden a los de Renoir, y los de Toulouse-Lautrec a los de Rousseau, en un endiablado torbellino de formas, sonidos, actitudes, luces, volúmenes y manchas de color. Los escenarios –asombrosamente cambiantes– se llenan y vacían de un pueblo festivo y vital, un pueblo de soldados y bailarines, de hombres que transitan casi mecánicamente por la Plaza de la Concordia de Dufy, se alegran con el exotismo luminoso del “Zoo” de Rousseau, o se impregnan del lirismo sosegado y umbroso del “Muelle de las Flores” de Renoir. Penetramos el encanto viejo del Montmartre de Utrillo, en tanto que el guignol tiene un fugaz recuerdo para los clowns de Rouault y la fachada de la Opera se ilumina, de noche, mientras surcan el cielo las retorcidas quimeras de Van Gogh. El “Moulin Rouge” de Toulouse-Lautrec descubre la espesa voluptuosidad de sus entrañas para que Gene Kelly se transforme en un frenético Valentin le Desosé, ante la mirada vigilante de Aristides Bruant”.
La visión del pintor
“La visión de un pintor sirve a quienes realizaron esta película, Minnelli y Kelly con la ayuda de la diseñadora de vestuario Irene Sharaff y el director de fotografía John Alton, para adentrar al espectador en el mundo bohemio del viejo Paris, a pesar de que la inmensa mayoría de la película está hecha en estudio, se presentan desde el comienzo los planos generales de la ciudad, y algunas de sus características, los vecinos, el barrio, el mercado de las flores, la vieja buhardilla de Montmartre.
“El tratamiento del color es notable, en Technicolor tricromático, que trata de emular el estilo de los pintores impresionistas, en especial en el deslumbrante ballet final, apoteosis que ha pasado a todas las antologías y donde el operador John Alton consiguió captar con gran maestría la estética pictórica de los impresionistas, en un homenaje que el cine le ha hecho a la pintura, la danza y la música en general.
“Con el apoyo de la música de Gershwin y el dinamismo de la coreografía, pasan inspiraciones y movimientos de los lienzos de Van Gogh (el exterior del palacio de la ópera, con sus luminarias de fondo en el cielo), Renoir y Manet (el muelle de las flores), Toulouse-Lautrec (Moulin Rouge), Rousseau (el parque zoológico), Dufy (La plaza de la Concordia), Utrillo (Montmartre), en un torbellino de formas, sonidos, luces, manchas de color y los cambiantes escenarios”.
Joan Munsó Cabús (1997): El cine musical de Hollywood, Vol. II (1945-1997). Ediciones Film Ideal.
Quien esté interesado en la relación del cineasta Akira Kurosawa con las pinturas de Van Gogh para el rodaje del respectivo episodio de su película “Sueños” puede consultar en el Blog “Alicia por Amor al Arte” de Blogspot la nota:
http://aliciaporamoralarte.blogspot.com/2012/07/los-suenos-akira-kurosawa-y-vincent-van.html
