“Javier (Acuña) puede hacer una interpretación sociopolítica de la realidad argentina a través de la Astrología. Advierte que el 20 de enero del próximo año (2020) ocurrirá un fenómeno no muy favorable para nuestro país que involucra a los planetas Saturno y a Plutón, y destaca que prepararse minimiza el impacto negativo de lo que pueda ocurrir”, menciónase en HermaNAfrodita (www.hermanafrodita.com) (1). Fue en octubre del 2019, y no queda claro si lo “no muy desfavorable” (es decir, “podría ser peor”) e “impacto negativo” concierne a la más fechada reasunción del peronismo al gobierno nacional o la devastadora COVID. Dado que se dijo en buenos aires ciudad, ambas posibilidades -realidades- son equivalentes, para mucha gente.
En los últimos días hice notar la desagradable y silenciosa negativa, sin explicaciones, de Alternativa.com a publicar mis convocatorias para modelos de fotografía de autor en desnudo. Intenté comunicarme con el astrólogo y actor, informático Javier Acuña, titular del emprendimiento, y no recibí respuesta vez alguna. Más extraño aún dado que su sitio web, con gentileza, ha publicado un centenar de veces esas convocatorias durante casi diez años.
JACUNA (THALBERG) ACUÑA, THE FIRST TYCOON DE LA EMPRESA COMERCIAL ALTERNATIVA. Por Amilcar Moretti
Desde hace un tiempo, Alternativa dice haber iniciado un cambio que responde a una nueva forma de ser, cambio en el cual parece decisivo la desactivación escénica que a través de dos años impuso la pandemia Covid, y a la vez, el ingreso a un mundo (teatral o no) impredecible por el protagonismo y hipotética hegemonía de la “comunicación” digital. La llamada “revolución tecnológica”, que lo es, y pone en cuestión la subjetividad misma del humano (¿sujeto aún?). Entre ellos, Acuña, grosero.
El rechazo a publicar mis convocatorias, útiles para que jóvenes sin (con) trabajo obtengan un ingreso no desechable en estos momentos, se siente como un intento de ejercicio de poder basado en el ninguneo y el desaire más reconocibles. Actitud fea, nada viril en estas contingencias históricas con letra “e”. Pero, más que nada y ante todo se parece mucho a la censura, tema sobre el que hablaré. “Es mío y hago lo que quiero”, puede sentir el dueño del medio, y así actúa su particular sentido de “libertad”. Libertad de propiedad, paradójica y contradictoria es un medio que es comunitario y se autodefine como “comunidad en escena”. Promueve muchos talleres sobre nuevos medios digitales y escénicos y la previsión de novedosos e impredecibles públicos, sin lograr acertar en precisiones y sí conjeturas de mercadeo, porque al respecto hay una única cosa segura: el nuevo público es o será diferente, pero no se sabe cómo es ni cómo será.
“Señor, ¿cuántas veces tengo que perdonar a mi hermano que peca contra mí? ¿Hasta siete veces?” A lo que Cristo le contestó: “No te digo que hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete” (Evangelio según Mateo, creo). “Cuando Jesús dice “70 veces 7” uno puede pensar: “70 por 7 igual a 490”. Pero sería muy poco. Entonces los chicos (alumnos) plantearon, debe ser “7 elevado a las 70″, que conduce a un número inmenso. Pensemos, ¿cuál es el tiempo físicamente o humanamente posible? Un segundo. Entonces, la vida humana no alcanza para completar ese número. Ni siquiera alcanza el tiempo que tiene nuestro planeta en el universo”, resolvió (el profesor Rey) Zarza, sorprendiéndose cada vez más. “Es un número inconmensurable. No es comprensible físicamente para la mente humana”. (2)
En cambio, al parecer para el dictamen judío en el Antiguo Testamento los oportunidades ordinales son distintas: “La enseñanza judía era que uno debía perdonar a su prójimo tres veces. Un maestro judío enseñaba que “El que pide perdón a su prójimo no debe repetirlo más de tres veces”; otro enseñaba: “Si uno comete una ofensa una vez, se le perdona. Si comete una ofensa una segunda vez, se le perdona. Si uno comete una ofensa una tercera vez, se le perdona. Pero la cuarta vez, ya no se le perdona”. (3)
“Está en mi carta natal la pulsión por proteger a los desprotegidos, sostener a ese circuito pasional: nuestro foco es el nicho de los que nadie atiende. Tengo una larga relación con lo alternativo”, le confesó en el diario LA NACION el 28 de marzo del 2020, inicio de La Peste, parece que astral. “Antes de Alternativa Teatral, había hecho Informática Alternativa. Alteridad no es lo mismo que otredad, porque tiene que ver con la capacidad de ponerte en el lugar del otro. Para mí es una forma distinta de hacer las cosas. Por otro lado, la palabra teatral ya me parece vieja, porque las artes escénicas trascienden lo teatral, hay espectáculos que no sabemos ya si son o no teatro, son performances, son la vida. Y cuando nos preguntamos adónde queríamos dirigirnos en esta nueva etapa nos pareció más posible abrirnos a los espacios de música alternativa”, dice Acuña, astrólogo, actor, informático y, aunque no se identifique con el término, empresario “alternativo”, un innovador con las herramientas del sistema para abrir puertas”. “Alternativa, GPS de los espectadores teatrales” (4). En consecuencia, Javier Acuña con su mirada astral está en condiciones de darnos su Sistema de Posicionamiento Global (en teatro, claro).
ALTERNATIVA CENSURA
La censura en democracia en Argentina desde 1983 no ha sido habitual, en sentido tradicional. Cuesta recordar hechos (los hubo) que alcanzaran notoriedad nacional. Sí hay que tener en cuenta una microcensura cotidiana ejercida mediante la repetición de lugares comunes, en general muy reaccionarios, aunque -¡oh, novedad!- también reconocen rostros “progresistas”. Una censura “mainstream”, pero no la vulgata -hasta hoy- de la represión de la última dictadura militar. Empero, el temor, el miedo existen. También es posible lamentar probables actos groseros de censura en el interior perdido del país, tan naturalizados que ni se reconocen como tales.
La censura en democracia ha sido en cambio más fuerte en otras áreas de la comunicación: en la televisión política, informativa y de entretenimiento y en el periodismo en general. Se cita siempre que en las presidencias de Alfonsín y Menem hubo “casos de censura previa a periodistas, artistas y comunicadores. Sin embargo, aquellos mensajes que consiguieron tomar estado público se beneficiaron ampliando su llegada a mayor caudal de receptores a los que aspiraban originalmente. Casos como la revista Cerdos & Peces, el programa “Cable a Tierra”, el periódico Prensa Confidencial, el tratamiento por parte del gobierno de Alfonsín de la información oficial en los sucesos de Campo de Mayo y La Tablada; Tato Bores y la jueza Servini de Cubría (Nota del Editor: la protesta la recuerdo como un acto permitido para suponer más libertad. La oposición del rey), los levantamientos de los programas “Sin Límites”, “Las Patas de las Mentiras”, “Día D” y “Bajo Palabra”, y la prohibición de la puesta en el aire de la canción “Sr. Cobranza” en la versión de Bersuit Vergarabat durante la década menemista”. (5)
Años después, para Cordera y el grupo llegó el castigo anunciado: acusaciones de abuso sexual en el 2016 y un ex miembro muerto en la calle por frío y hambre. Gustavo Cordera, voz de la Versuit Bergarabat debió casi retirarse de su carrera musical por la sanción a una expresión que es fue un acto de inoportunidad y desubicación desprevenida y no una defensa de machismo brutal, como se la hizo aparecer. Todo muy progresista y, a la vez, muy reaccionario.
En marzo del 2016, el canal de televisión C5N no transmitió el programa Economía Política del periodista Roberto Navarro. Se había promocionado un análisis especial denominado El socio del presidente. “… el periodista pretendía exponer los vínculos del presidente Mauricio Macri con el empresario y amigo personal Nicolás Caputo, publicó Prensa Latina. El conductor del programa informó que la suspensión del programa fue debido a las presiones del Gobierno, por lo que se evidenció la censura, criticaron políticos y periodistas de ese país suramericano”. (6)
ULTRAMONTANOS Y PROGRES ARCOIRIS: TODOS PATEAN EN CONTRA
En estos días se ha cuestionado la “adaptación de la obra “Theodora” de Händel , que dirige Alejandro Tantanian, donde se incorpora el pensamiento de la teóloga argentina Marcella Althaus-Reid, en la interpretación de Mercedes Morán. El periodista Franco Torchia fue quien aportó los textos de Althaus-Reid, (…) teóloga feminista se graduó en el país, ejerció como catedrática en Escocia desde mediados de los 80 hasta 2009, cuando la encontró la muerte era directora de la Asociación Internacional de Teología Queer”.
“La obra se ha puesto en escena en el Teatro Colón, el más importante de Argentina, y la más cuestionada parece ser la actriz Mercedes Morán. Cabe recordar que tras la última dictadura militar “la pareja italiana del actor Dario Fo y la actriz Franca Rame estrenaron obras de su autoría en el Teatro San Martín. En mayo de 1984, Fo presentó Misterio bufo, donde abordaba los misterios evangélicos en el estilo jocoso de los juglares medievales, y Rame interpretó Tutta casa, letto e chiesa, monólogo cómico-grotesco sobre las mujeres, escrito desde su pionero compromiso feminista como dramaturga desde los 70. El escándalo que provocó la pareja en su paso por Buenos Aires es una página muy oscura, un anecdotario de violencia que incluyó destrozos en el teatro de la calle Corrientes…” (7)
En el caso de Javier Acuña y la publicación de mis convocatorias parece -hipótesis más que probable-, que no encuadran en el nuevo esquema de Alternativa Comunidad en Escena de Buenos Aires. Dictan ciclos varios sobre el nuevo mundo digital, la impensable escena virtual y los (solo imaginados, por ahora) públicos a distancia, lejos de los escenarios, pegados a la pantalla de la computadora. Pero nunca, nunca hasta ahora han analizado la probabilidad razonable de que esa cultura mundial digital a distancia incluya, para la cultura culta y popular, un grado devastador de censura, imperceptible también.
Sobre este tema, la censura, los nuevos modos de la censura, la autocensura, las restricciones, las prohibiciones silenciosas, las “adaptaciones” lastimosas para sobrevivir, encerrado y viscoso en el innovador y resbaladizo universo digital, celular, electrónico, virtual, contemplativo, inmovilizado, sobre todo esto, digo, nada dice Javier Acuña, ahora -al su entender- con más posibilidades empresariales. (8)
Hay seguramente, otros factores en la decisión canceladora de Acuña y su espacio web, que es un comercio (dice que no es empresa, pero al rato y en otro lado se contradice), una parte de la industria del espectáculo, en intermedio de reciclamiento por ahora. Olvida que también plantó un servicio social para los artistas o creadores que piden o dan trabajo. Lo del teatro Colón puede tomarse como una provocación por parte de los puestistas y entre ellos y opositores un suceso que en este momento nacional no le conviene a un gobierno peronista que tiene cerca elecciones muy difíciles. Y Acuña, los astros no le dicen, o le dicen y no escucha, que también está en el Colón y en medio de esa gran galleta de “fenómenos desvaforables” e “impactos negativos” para su subjetividad oscilante entre lo creativo, entreperneur estilo años 90, las contingencias de género y lo financiero. El dinero. Gorilón sensible, digamos.
En la ciudad de Buenos Aires, la de Acuña y la Comunidad en Escena desde el 2007 gobierna la derecha, neoliberal y autoritaria, neofeudal. Dados los datos que se encuentran en internet, como contrataciones directas, no sería extraño que Acuña hubiese concluido -o hubiesen sugerido- que ERÓTICA DE LA CULTURA no es “conveniente” para sus metas de cambio transformador en base a “rock y amor”, y otras cosas por el estilo que realmente sorprenden que las diga así, con ligereza.
Las “normas” de la empresa de Javier Acuña en algunos casos no difieren mucho de las de Facebook . Interesante es señalar esta semejanza, justo en un momento en que en el senado de los Estados Unidos se ha formulado una pesada e importante denuncia contra Facebook que implica “un grave problema de seguridad y hacen daño a la democracia y a los usuarios, sobre todo jóvenes”, entre otros, por sus cualidades adictivas y “tóxicas”. (9) Es probable, aún no se anima a decírmelo, que considere que mi trabajo entra feisbuqueanamente dentro de lo “pornográfico ” o de imágenes de “desnudos cuyo destino no pueda garantizarse”. Sentirá Acuña espanto ante la palabra “censura”. No es “censura”, se dirá a sí mismo. Solo se cumplen las “Normas”. Pero esas normas no son comunitarias. Porque ¿cuándo se votaron esas “normas” en la comunidad? Es la novela del quía censor. El silenciamiento del rencor. La sumisión a la atemorización mediática. La mención de Rodrigo Cañete.
Dicho de otra forma, en cuanto a lo que yo hago y pienso y digo, según el modelo de la gran red ahora cuestionada, “toxicidad” y “adicciones” sí, “atentar contra la democracia” sí, pero unas nalgas o pechos femeninos, no. Es una cuestión política, es una cuestión de género, es una cuestión de viejo resentimiento, es una cuestión de conveniencia, una cuestión de dinero, un tema de rencor en indiferencia.
El tema, el gran peligro aparecerá abiertamente cuando la censura se devore al teatro, como denunció años atrás Jo Glanville, en democracia (10), porque entonces no solo afectará a un pequeño número de espectadores sino a un público masivo de subjetividad virtualizada. La censura comienza a democratizarse, no en el sentido hipotético de que decide la mayoría sino que le toca a todos, aunque no por igual. A cada agosto le llega su San Martín, o a cada chancho le llega su San Martín de Tours, santo francés con refrán muy español. No hay amenaza en el refrán -pura religiosidad popular, de barrio de pueblo- que alude al patrón santo de Buenos Aires ciudad y tiene su propia basílica en Tours, Francia. Cerca de Orleans y las aguas del Loira. Su patronazgo es sobre comercios (!!!), soldados, tejedores, textiles, caballos.
La festividad de San Martin de Tours es el 11 y 12 de noviembre, según ritos romanos o bizantinos. Cerquita, el domingo del 14 de noviembre próximo, hay elecciones nacionales intermedias. Tal vez el dueño de la comunidad escénica esté a la espera de los resultados para hablar. No se anima a hablar mano a mano. Vendrán tiempos peores. Quizás, todos revolcados. San Martín de Tours.
“Que sólo es el tiempo
El que llevará tu vida
A donde quiere que estésPersonalmente, creo que todo esto es una locura
Personalmente, creo que todo esto es una locuraDeja, sigamos remontando vuelo
Deja, la luz siempre atraviesa el bosque
Después, es sólo un recuerdo
Después, sólo pasará…”
(1) https://hermanafrodita.com/2019/10/20/javier-acuna-toma-dos/
(3) https://www.diariodealmeria.es/opinion/articulos/Cuantas-veces-perdonar_0_808119703.html
(5) Nicolás Blanco Rodríguez. “Censura en democracia. Estudios y análisis de los modos de censura en Argentina durante las presidencias de Raúl Alfonsín y Carlos Menem”. Editorial Académica Española, 2018. Monografía con fecha del 2008 dentro de la Universidad del Salvador, Buenos Aires.
https://racimo.usal.edu.ar/3234/1/P%C3%A1ginas_desde500022695-Censura_en_democracia.pdf
https://journals.openedition.org/ilcea/3156
https://journals.openedition.org/nuevomundo/37982
(7) https://www.pagina12.com.ar/373752-theodora-en-el-teatro-colon-sobre-la-censura-como-defensa-de
(8) https://sites.google.com/site/301comunicacion/home/la-opinion-publica/internet-y-la-democracia
(10) https://www.pagina12.com.ar/diario/dialogos/21-154708-2010-10-11.html
